NUEVA ZELANDA
LOS DEMONIOS DE TASMANIA
El parque nacional Abel Tasman nos teletransportó literalmente a este trocito de paraíso tan cercano como es la costa brava.
El parque nacional Abel Tasman nos teletransportó literalmente a este trocito de paraíso tan cercano como es la costa brava.
Aunque nuestra opinión es 100% subjetiva, Wellington nos pareció un buen lugar para vivir, está lleno de bares y lugares interesantes, y como siempre, la gente es cojonuda.
De todas formas, Auckland nos encantó por un simple motivo: Laura y Bruno, que nos dieron sin quererlo un máster en cómo ser un anfitrión cojonudo.