NWE SHAUNG
Myanmar no tiene muchas playas, pero lo poco que tiene es más que respetable, como la playa de Nwe Shaung en la que decidimos acabar nuestra visita a este espectacular país.
Myanmar no tiene muchas playas, pero lo poco que tiene es más que respetable, como la playa de Nwe Shaung en la que decidimos acabar nuestra visita a este espectacular país.
El Lago Inle, lugar donde pasaríamos un par de días explorando los alrededores de un lago con mucha vida debido a la gran cantidad de pueblos que viven en sus orillas y lo más sorprendente, dentro de él.
Montañas de arrozales de un verde que si le pusiéramos algún tipo de filtro provocaría epilepsia a más de uno, campesinas con turbantes en naranja y púrpura que salpicaban y llenaban de alegría un paisaje monocolor…
Estábamos físicamente y mentalmente agotados de asimilar tanta belleza. Sin palabras. Bagan.
La sensación de haber cruzado una puerta umbral espacio tiempo es inevitable. Nuestro vuelo llegaba directo a Mandalay, auténtico entre lo auténtico.
Alquilamos las motos para la mañana siguiente visitar a nuestro aire las ruinas de la antigua capital del reino de Tailandia, una maravilla para los ojos.